El mayordomo de la iglesia era uno de los oficios menores que nombraba anualmente el Concejo, en reunión celebrada en el Ayuntamiento, anunciada a son de campana tañida. Según el diccionario de la RAE es el «Oficial que se nombra en las congregaciones o cofradías para que atienda a los gastos y al cuidado y gobierno de las funciones», con lo que si había obras en la iglesia, él era el encargado de la recepción de material y los pagos, y en general eran los responsables de la administración y cuidado de los recursos de la Iglesia.
Para darnos idea de su función, vamos a exponer un ejemplo con un acta del pleno del Concejo de nuestro pueblo, y tenemos ejemplos de elección de mayordomo de la iglesia en distintos documentos a lo largo de los años, pero vemos que en 1614 se reunió el Concejo el día 11 de noviembre de ese año y se trataron temas como el del guarda de las tierras de sembradura de la zona del Serrejón (sierra de Hoyo), el Palancar y los Llanillos, pasando a continuación al que dice que está acordado que en la iglesia de este lugar se haga una tribuna y se haga un portal y un archivo donde estén los papeles del Concejo, pero teniendo en cuenta la necesidad que tiene la iglesia y que no tiene para pagar todo, se acordó en el Concejo que se ayude para hacer el portal de manera que cada vecino que coja una carretada de jaras del Ejido, que ha de ser del Valle, al final del arroyo, ha de llevar una cédula de autorización que les dará la persona que para ello nombre el Concejo, pagando por cada carretada de 90 haces de jara la cantidad de cuatro reales, y el control lo llevará el mayordomo de la iglesia, habiendo de plazo para coger la jara hasta finales de febrero de 1615.
En otros documentos se ven los nombres de las personas elegidas para mayordomos de la iglesia, y así en el acta de la reunión del Concejo celebrada el 15 del mes de enero de 1679, en que se nombraron mayordomos de la iglesia a los vecinos Francisco Callejo y a Pedro Mingo, y en la reunión celebrada el 10 de enero de 1689, se eligieron por mayordomos a los vecinos Juan Uzendo y a Francisco Callejo, y podíamos seguir dando nombres, pero vamos a ver un caso en que el Sr. cura pidió ser elegido mayordomo.
Existe un documento en el Archivo Histórico Diocesano de Madrid, en que el párroco de entonces, D. Remigio Martínez Ramón, presbítero que ejerció el cargo de párroco de Moralzarzal como cura ecónomo durante unos meses en el año1895, meses desde septiembre hasta mediados de diciembre, siguiendo en la parroquia a D. Juan Francisco García, cura de Becerril de la Sierra encargado de la iglesia de Moralzarzal, y antes de D. Casimiro Sanz, cura de Collado Villalba, que precedió al párroco D. Remigio Muñoz y Coello en las funciones eclesiásticas de la parroquia de San Miguel Arcángel de nuestro pueblo, y en vista de que no había quién pudiera hacer el oficio de mayordomo de la Iglesia, se dirige a las autoridades eclesiásticas con una petición, y se ve en la carta dirigida al Sr. Secretario de Cámara y Gobierno del Obispado de Madrid-Alcalá, que dice así :
Estando por cobrar la dotación de esta fábrica desde el mes de Agosto, y por satisfacer los gastos que a ella corresponden, le ruego se sirva disponer se me nombre mayordomo de la misma en virtud de no haber aquí otra persona que sepa y pueda desempeñar dicho cargo.
Dios gûe. a V. S. ms. as. Moralzarzal 3 Nbre. 1895
Y lo firma D. Remigio Martínez, como cura ecónomo de Moralzarzal
Esta carta va en papel sellado, como se ve en la foto adjunta del documento, con los sellos de la parroquia de San Miguel Arcángel, y el de la Secretaría de Cámara y Gobierno, del Obispado de Madrid-Alcalá, con el número de entrada 3798 de fecha 6 de noviembre del 95.
Entre los documentos del mencionado Archivo Histórico Diocesano, hay otro en el que se ve que el Alcalde del Moral pide al Sr. Obispo la Mayordomía, y en la carta se ve que va dirigida al Sr. Arzobispo-Obispo de la Diócesis de Madrid-Alcalá, y dice así :
Excmo. é Iltmo. Sr.
Con fecha cinco de Marzo del corriente año, tuve el honor de manifestar á V.E. lo siguiente : «No existiendo Mayordomo de fábrica en la Parroquia de esta villa, el Ayuntamiento de su presidencia en sesión ordinaria celebrada con fecha diez y nueve de febrero último, acordó que se dirigiese atenta comunicación al Señor Cura ecónomo de esta villa y así se verificó en dos del corriente mes manifestándole la conveniencia de que se nombrase dicho mayordomo, poniéndose de acuerdo al efecto con el que suscribe como Alcalde Presidente de este Ayuntamiento para realizar ésto en una junta á la que asistirán el Regidor Síndico del Ayuntamiento y dos vecinos contribuyentes, y por dicho Señor Cura se manifiesta en oficio de hoy que siendo el asunto de que se trata propio y exclusivo del Excmo. Sr. Arzobispo Obispo de esta Diócesis, á V.E. es á quien debe dirigirse esta Corporación a Su tal atención hé acordado dirigirme á V. E. suplicándole encarecidamente que con objeto de que se trata propio y exclusivo del Excmo. Sr. Arzobispo-Obispo de esta Diócesis; á V.E. es á quien debe dirigirse Corporación.
En tal atención hé acordado dirigirme a V.E. suplicándole encarecidamente que con objeto de que la fábrica de esta Iglesia pueda administrarse debidamente se digne disponer lo conveniente á fin de que se nombre dicho Mayordomo, con intervención del que suscribe, del Regidor Síndico de este Ayuntamiento y de dos contribuyentes vecinos, por ser así procedente, puesto que esta medida únicamente há de redundar en beneficio de la Iglesia, sin que con ello se trate de ningún modo de menoscabar un derecho en lo más mínimo.
Dios gûe. a V. S. ms. as. Moralzarzal 5 Marzo 1898
El Alcalde
Y lo firma Melchor Antuñano, a la sazón alcalde del pueblo en esa fecha, y se ve en la carta, claramente, lo de la administración de la fábrica de este pueblo de Moralzarzal, función que hacía el mayordomo.
Antonio López Hurtado “Zárate”